top of page
Buscar

Hummus de Calabaza asada y comino – Receta especial para Halloween

Aquí andamos gente bonita. Sí, sé que estoy un poco desaparecida últimamente, pero creo que a todos nos pasa que algunas épocas las tenemos más ocupadas que otras ¿verdad? Sin embargo, para compensar la espera después de estas semanas ausente, te traigo un 2×1. Así que no te pierdas el post de hoy porque aprenderás la receta de un clásico de la cocina árabe, pero también una variación que para otoño resulta de lo más deliciosa. ¿Te quedas? Pues vamos, que me muero porque contarte.

∨∧∨∧∨∧∨∧∨∧∨∧∨∧∨∧∨∧∨∧∨∧∨∧∨∧∨∧∨∧∨∧∨∧∨∧∨∧∨∧∨∧∨

Normalmente en todas las recetas del blog encuentras pequeñas anotaciones sobre los ingredientes. Muchas veces te indico alternativas en caso de que no dispongas de determinados alimentos que no suelen estar presentes en la despensa de cualquier persona. En otras ocasiones te indico si el ingrediente es fundamental o puedes omitirlo. Todo esto con la idea de que dispongas de todas las opciones posibles para hacer la receta que te propongo. La receta de hoy utiliza calabaza, pero te he comentado que te debo un 2×1 dada mi ausencia, así que hoy directamente omito las notas porque tengo bastante que contarte sobre el ingrediente clave de las dos versiones: el Tahini.

El Tahini es una pasta o mantequilla hecha a partir de semillas de sésamo que está deliciosa. Este ingrediente tiene muchas propiedades nutricionales, entre ellas su alto contenido en calcio. Normalmente para el Hummus utilizo el Tahini blanco. Esta variedad es la que más propiedades antioxidantes tiene porque se elabora a partir de las semillas de sésamo crudas. Al no tostarlas, no pierden parte de la vitamina E que contribuye a luchar contra la oxidación de nuestro organismo. Si no dispones de tahini blanco, puedes utilizar el tahini integral, en el que se usan las semillas tostadas. En este caso, es de un color marrón. Esto se debe a que, además de tostarlo, no se han descascarillado, cosa que sí ocurre en el Tahini blanco. Al descascarillar las semillas de sésamo, el contenido de calcio disminuye, pero a pesar de ello sigue siendo importante. Tanto la variedad blanca como la marrón son ricas en ácidos grasos esenciales, omega-6 principalmente. También se caracteriza por contener nutrientes que favorecen el buen funcionamiento de las neuronas del cerebro. De todos modos, si no dispones de ninguna variedad, simplemente puedes hacer la receta con semillas del sésamo.

Y uno de los platos más conocidos y más sabrosos que puedes elaborar con Tahini es el Hummus. Como te decía en la introducción del post de hoy, el Hummus es un plato muy típico de la cocina del norte de África y de Oriente Medio. Cuando probé por primera vez este plato hace ya bastantes años en un restaurante libanés, me quedé prendada de su sabor, de su textura y de los aromas tan deliciosos que desprendía. Si vas a cualquier restaurante con este tipo de cocina, lo más probable es que lo comas con pan de pita, pero hay multitud de alternativas que puedes utilizar como acompañamiento y que te contaré más adelante.


hummus-calabaza

Otro de los datos más interesantes de este plato a nivel nutricional, además de todo lo que te he contado, es que las semillas de sésamo son ricas en metionina, un aminoácido deficitario en las legumbres. De modo que el Hummus, que combina las semillas de sésamo y los garbanzos, hacen una proteína vegetal de lo más completa. Y esta danza de completarse un ingrediente al otro es también a la inversa porque las legumbres son ricas en lisina, aminoácido que no aparece en el sésamo. Así que ¿no me digas que no es una combinación de lo más acertada?

Pasemos con los ingredientes y la receta que sé que lo estás deseando 😉


ingredientes-hummus

Contenido

Ingredientes (para 4 personas)

  1. 350 gr de calabaza

  2. 400 gr de garbanzos cocidos y escurridos

  3. 4 cucharadas de aceite de oliva virgen primera presión en frío (y un poco más para decorar)

  4. 2 cucharadas rebosantes de tahini o 40 gr de semillas de sésamo

  5. 1 cucharita de comino (y un poco más para decorar)

  6. 2 dientes de ajo

  7. 1/2 limón exprimido

  8. Sal sin refinar al gusto

Elaboración del puré de calabaza asada

  1. Corta la calabaza en varios trozos y pélala.

  2. Colócala en la bandeja del horno o en una fuente con un poco de aceite, repártelo bien utilizando un spray o con un pincel de cocina.

  3. Puedes añadirle varios dientes de ajo machacados por encima si te gusta el sabor del ajo asado, un poco de comino y sal. El ajo asado te dará un sabor con un punto distinto al Hummus que te presento, pero igualmente delicioso.

  4. Asa la calabaza durante 25-30 minutos a 180º C. El tiempo y la temperatura dependerá del horno del que dispongas.

  5. Cuando la calabaza se haya dorado y esté blanda, retírala del horno y deja enfriar mientras preparas el resto del plato.

Elaboración del Hummus de calabaza asada con comino:

  1. En una batidora de vaso o en un procesador de alimentos añade todos los ingredientes de la receta: garbanzos, ajo, tahini o semillas de sésamo*, aceite, limón, sal y comino.

  2. Añade la calabaza asada (y los ajos asados si los añadiste cuando la asaste) y tritura hasta que obtengas la consistencia deseada. Yo prefiero no triturar en exceso, pero eso depende del gusto de cada uno. No te olvides de bajar el contenido que queda en las paredes del aparato que estés utilizando, puesto que suele terminar ahí.

  3. Rectifica de sabor. Antes de retirar el Hummus de la batidora, prueba y añádele cualquiera de los ingredientes que deseas que destaque por encima de otro: un poquito más de zumo de limón, quizá un trocito más de ajo, sal…lo que sea que le falte para que tenga el sabor que a ti te gusta.

  4. Sirve en un bol y añade un buen chorreón de aceite, espolvorea un poco de comino por encima y a disfrutar.

* Si tu batidora de vaso no es muy potente, te aconsejo que antes de triturar todos los ingredientes, primero tritures las semillas de sésamo por separado, así soltarán sus aceites, y el resultado se parecerá más al sabor del Tahini y, por tanto, al Hummus.


hummus-calabaza2

Elaboración del Hummus clásico

La elaboración del Hummus clásico es mucho más fácil que el de calabaza asada porque no hay que asar la calabaza. Vamos, que, si dispones de los garbanzos ya cocidos, se hace en un pispás. Podemos utilizar las mismas cantidades que el de la receta que te he dejado, pero saldrá menos Hummus al faltar el puré de calabaza. Aún así da para un buen picoteo para cuatro comensales.

Me gusta preparar el Hummus y comerlo cuando ya se ha enfriado. De hecho, aunque no soy fan de los congelados y los preparados de un días para otro, algunas veces es inevitable echar mano de ellos. Y en otras ocasiones, se da el caso de que, cuando la elaboración ha reposado, los sabores se asientan y se integran, potenciándolos mucho más. El plato que tenemos entre manos tiene esa característica, así que suelo preparar bastante cantidad y guardarla en el frigorífico para comer varios días. En invierno apetece tomarlo más a temperatura ambiente, pero en verano está delicioso cuando está recién sacado del frigorífico.


crudites-para-hummus

Esta especie de puré lo puedes comer de multitud de formas. Como ves en la foto, yo lo acompañé de unos crudités de pimiento rojo y de zanahoria en forma de calabacitas, muy adecuadas para estas próximas fiestas. También puedes poner un bol con nachos o totopos. Si tienes pan integral o unas tortas de cereales puedes untar el Hummus y te sorprenderá qué rico está. También sirve como base para hacer un sandwich o un bocadillo con lechuga, tomates, pepino…lo que quieras. Prepara los Bocaditos de tofu al Garam Masala y úntalos con este sabroso Hummus. Es una combinación ganadora, te lo aseguro. También puedes poner un «pegotito» en un plato con verduras asadas y ensalada, e ir «mojándolas» en este puré de garbanzos.

Sea como fuere, esta plato es fácil y rápido de hacer, nutritivo y sabroso. Te sirve para una fiesta de Halloween, en las que la calabaza es la protagonista, pero también para un picoteo improvisado con los amigos o con alguien especial. Tú sólo prepáralo, disfrútalo y ya me cuentas el resultado ¿te parece?

Un abrazo,


PD: prefiero preparar las legumbres en casa, pero algunas veces no podemos llegar a todo ¿no te pasa? Por eso a mí me resulta muy útil tener en casa al menos un bote de garbanzos ecológicos. Con ese bote de legumbres y cualquiera de las recetas de hoy tienes solución para un almuerzo, una cena o un tapeo entre amigos que se te presente. Así que: ¡para la lista de recetas imprescindibles! 😉

0 comentarios

Entradas Recientes

Ver todo
bottom of page