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Por qué un détox puede ayudarte con tu enfermedad autoinmune

El lunes publicaba un post en el que te contaba Por qué no deberías hacer un programa détox. Este artículo surgió a raíz de algunas preguntas que me habéis hecho en relación con el próximo taller que haré en Madrid (si no sabes de qué te estoy hablando, pincha aquí). Sin embargo, hubo una pregunta que llamó poderosamente mi atención. Hoy, tengo la intención de contestarla sin adentrarme en tecnicismos imposibles de entender y explicarte por qué un détox puede ayudarte a mejorar tu enfermedad autoinmune.


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Las personas

Las personas que tienen una enfermedad autoinmune, presentando sintomatología muy dispar, tienen algo en común: el cuerpo se ataca así mismo. En su origen, lo que conecta estas enfermedades tan dispares es un proceso bioquímico central: una respuesta inmunológica arrolladora, llamada inflamación sistemática, que inevitablemente resulta en que el cuerpo ataca a sus propios tejidos.


Contenido

ENFERMEDAD AUTOINMUNE E INFLAMACIÓN

Según el Dr. Seignalet, doctor en medicina y catedrático universitario, la inmunidad precede a la inflamación. Por tanto, es fundamental que tengamos en cuenta que, cuando hay una enfermedad autoinmune, detrás hay una inflamación. Y es ahí donde nos tenemos que centrar, en esa inflamación crónica que nos perjudica.



LOS DÉTOX

Entonces ¿dónde entra el papel del détox en todo esto? Primero debemos saber qué es exactamente un détox. Pues bien, la palabra détox es una abreviación inglesa del término ‘detoxification’, es decir, desintoxicar, que no es otra cosa que limpiar la sangre. Según el Diccionario de la Real Academia de la lengua española, desintoxicar es ‘eliminar la intoxicación o sus efectos de alguien o de algo’. Y ¿qué vamos a eliminar? Tóxicos. Ni más ni menos.


EL PAPEL DE LA ACIDIFICACIÓN EN LAS ENFERMEDADES

Y es verdad que nuestro cuerpo es una máquina perfecta que está diseñada para eliminar tóxicos a través del hígado, de la piel, de los intestinos, etc. Sin embargo, hoy en día no le damos al cuerpo tiempo de descanso para que se pueda hacer cargo de limpiar de manera eficaz todas las sustancias que se acumulan al día. Eso sin tener en cuenta lo que se ha ido acumulando con el paso de los años: una mala alimentación, un estilo de vida estresante, intoxicación por medicamentos u otras drogas o químicos, etc. Como consecuencia las toxinas empiezan a acumularse en nuestro cuerpo y éste empieza a acidificarse. Dicho de otra manera, las toxinas originan un entorno ácido, y esta acidificación del cuerpo empieza a generar una serie de síntomas que pueden llegar a ser incluso mortales, como es el caso del cáncer. De hecho, cada vez más investigadores y médicos, destacan el papel primordial que tiene este mecanismo en la salud de cualquier persona. El doctor Alberto Martí Bosch, oncólogo pediátrico, afirma que la acidosis metabólica, es decir, cuando el terreno se acidifica y escasea el oxígeno, es la causa del cáncer.


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EL PH 

Pero quizá el concepto de la acidificación es totalmente nuevo para ti, así que voy a intentar resumirlo muy brevemente. El pH es una escala que va de 0 a 14 y mide la alcalinidad o acidez de una determinada sustancia. La sangre tiene un pH ligeramente alcalino, entre 7,35 y 7,45. Pues bien, la mayoría de las enfermedades agudas y crónicas son consecuencia de un exceso de ácido que reduce en gran medida el pH del cuerpo. Si el pH se desvía mucho más hacia la acidez, el cuerpo reacciona tomando las reservas de minerales alcalinos para poder hacer frente a esa situación de peligro. ¿Cuáles son las consecuencias de este robo continuo de minerales? Pues que se produce una deficiencia de ellos en los tejidos. Y estos minerales son necesarios para su correcto funcionamiento, y también para la actividad enzimática. De modo que, si tenemos en cuenta que las enzimas están detrás de todas las transformaciones bioquímicas que se producen y de las que dependen todos los órganos de nuestro cuerpo, podemos hacernos una idea de cuán importante es que nuestro cuerpo esté libre de acidez.


LA HIPERMEABILIDAD DEL INTESTINO DELGADO

¿En qué punto relacionamos entonces la acidificación con las enfermedades autoinmunes? Pues en el siguiente. El exceso de ácidos en el cuerpo tiene otro efecto devastador: la permeabilidad del intestino delgado, es decir, que la membrana del intestino se deteriora y presenta unos pequeños espacios por donde se cuelan al torrente sanguíneo residuos bacterianos y alimentarios que no deberían colarse. Según el Dr. Seignalet, la consecuencia de esta hipermeabilidad es la causa de numerosas enfermedades, entre ellas las autoinmunes, como demostró trabajando con un gran número de enfermos con distintas patologías.


Y aquí entra en juego el détox, ya que durante esta práctica se elimina las fuentes de toxicidad más importantes. Por tanto, un détox también ayuda a detectar alergias, sensibilidades e intolerancias alimentarias que, muchas veces, están enmascaradas por los síntomas de una enfermedad autoinmune. Cuando realizas este tipo de prácticas, aprendes cómo llevar a cabo una alimentación natural, libre de tóxicos, en la que se le da al cuerpo el tiempo necesario para eliminar lo acumulado y centrarse en la reparación de los daños de la toxemia. Y esto no significa ni mucho menos una curación, pero sí es el comienzo de un camino de sanación. Y no tiene nada de metafísico ni de esotérico, es ciencia pura y dura.


¿POR QUÉ NO TODOS LOS MÉDICOS NOS HABLAN DE ESTO?

Desgraciadamente los trabajos realizados en el pasado por numerosos investigadores y doctores no se dieron a conocer ni a los médicos ni al público en general porque fueron rechazados por los defensores de la medicina clásica. Como consecuencia no se publicaron ni en la prensa ni en las revistas especializadas. En la mayoría de los casos se desacredita a dichos profesionales con la excusa de que existen pocas pruebas sobre los fundamentos científicos de estas teorías y prácticas. Y la realidad es que efectivamente hay disponibles un número tan reducido de estudios sobre un número tan limitado de pacientes que la gente no tiene en cuenta los resultados que se obtienen. Y ¿por qué ocurre esto? Pues porque centrarnos, como punto de partida, en la alimentación para mejorar los síntomas o curar un gran número de enfermedades no reporta a la industria farmacéutica ni a determinados sectores de la industria de la alimentación beneficio alguno, sino todo lo contrario, supone un obstáculo importante para los intereses económicos. Si se pudiera demostrar que determinadas enfermedades denominadas como incurables hoy en día pueden mejorar sus síntomas o curarse teniendo en cuenta la alimentación y otros aspectos como el nivel de estrés ¿sería rentable realmente? Creo que no hace falta que responda.


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Un détox no es la solución, desgraciadamente, a ninguna enfermedad autoinmune, pero sí es el punto de partida para un nuevo estilo de vida basado en el amor hacia una misma que comienza con algo tan sencillo, pero tan importante y fundamental como es la limpieza de tu cuerpo.

Un abrazo grande,








P.D.: Comparto algunos estudios por si pudieran ser de interés para alguien. Stoldstam y col. (1979) sometieron a 16 enfermos a un ayuno casi completo y comprobaron su eficacia al cabo de 7-10 días. Kroker y col. (1984), Beri y col. (1991), Kjeldsen-Kragh y col. (1991) aportaron la misma clase de resultados.


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